Madrugada tipo 8. Desayuno café y tostadas con pan casero y dulce de ciruela o de leche. Todos se reunen ahí para meditar y decidir que aventura proxima enfrentar. Yo estaba entre experimentar en canoa el lago correntoso y los bosques de arrayanes. Finalmente opte por hacer ambas, no sabia como estirar las horas, pero lo iba a intentar. Salida del hostel en busca de un laverap y una bici. El costo del cajon lavado ya superaba mi ideal de precio, asi que debia lavar algo a manopla. En el camino me encuentro con Damian y Gabriela, una pareja de capital que habian llegado el dia anterior. Les comente que los alcanzaria en breves para la canoa, y asi fue.
Rente una bici y parti al correntoso. Sabia que era el inicio de un largo trayecto en bici, asi que debia entender como diablos pasar los cambios sin cortar la cadena. Llegada al lago. Alquiler de canoa y salida a remar. (aclaracion: el remo del gimnasio no se parece en nada a la realidad). Unas vueltas bordeando la costa, unas fotos entre canoas y mucha paz fueron los ingredientes del paseo. A la hora volvimos a devolver los botecitos y parti de urgencia al puerto, donde debia tomar el catamaran hacia los bosques.
Llegada, boletos, unas fotos y a navegar otra vez. 45 min. Hasta los bosques. En el viaje me cruce con Thania, una española que junto a su pareja recorrian de Usuahia a Mexico en BICICLETA. Eso me dio mas fuerza para recorrer los bosques en tiempo record. Excelente travesia; subidas, bajadas, arboles, ramas, barro, arena, y mas fueron los obstaculos a pasar en el regreso. Tiempo total: 1hr. 1/4. Regreso al hostel. Siesta. Comida con el grupo afuera. Unas cervezas y al sobre. Mañana sera otro dia...
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